La inteligencia artificial generativa (GenIA) está modificando la dinámica del mercado laboral, generando cambios significativos en funciones y actividades laborales. Según el informe Leveraging Generative AI for Job Augmentation and Workforce Productivity, publicado por el Foro Económico Mundial, la GenIA podría influir hasta en el 40% del total de horas trabajadas a nivel global en los próximos cinco años.
El estudio resalta que, aunque la automatización de tareas mediante la GenIA tiene el potencial de aumentar la productividad, también plantea preocupaciones relacionadas con el desplazamiento de empleos y la adaptación de trabajadores y organizaciones.
El informe identificó que las economías más desarrolladas enfrentan un mayor riesgo de interrupción, pero también tienen mayor capacidad para adoptar y escalar esta tecnología. Por su parte, las economías emergentes podrían aprovechar la GenIA para superar limitaciones estructurales y mejorar la productividad.